Cuestionario de Depresión Infantil (CDI)
7-17 años
El CDI es una herramienta psicológica para la detección y evaluación de síntomas depresivos en niños y adolescentes. Permite identificar de manera temprana la presencia y severidad de la depresión, evaluando aspectos como el estado de ánimo, la autoestima y las relaciones interpersonales. El CDI facilita que los profesionales de la salud mental obtengan una visión clara y estructurada del bienestar emocional infantil, lo que contribuye a planificar intervenciones personalizadas y eficaces.
Estructura y aplicación
Consta de 27 ítems, cada uno con tres opciones de respuesta que reflejan distintos grados de intensidad o frecuencia del síntoma evaluado. Esto permite una evaluación detallada y matizada de la sintomatología depresiva.
Puede aplicarse de forma individual o colectiva, tanto en contextos clínicos como educativos o de investigación. El tiempo de aplicación varía entre 10 y 25 minutos, lo que lo hace práctico y accesible.
Dimensiones o escalas
Evalúa dos grandes escalas:
Disforia: Incluye aspectos como humor depresivo, tristeza y preocupación.
Autoestima negativa: Evalúa juicios de ineficacia, fealdad, maldad, entre otros.
Proporciona una puntuación total de depresión, permitiendo identificar tanto la presencia como la severidad de los síntomas.
Subescalas
Además de evaluar una puntuación total de depresión, el CDI se estructura en cinco subescalas que permiten un análisis más específico de diferentes dimensiones emocionales y conductuales:
Estado de ánimo negativo (Disforia): Evalúa sentimientos de tristeza, irritabilidad, preocupación y malestar emocional general.
Problemas interpersonales: Mide dificultades en las relaciones sociales, incluyendo aislamiento, soledad y problemas para interactuar con otros.
Ineficacia: Refleja sentimientos de incompetencia, baja motivación y falta de confianza en las propias capacidades.
Anhedonia: Se refiere a la incapacidad para experimentar placer o diversión en actividades que antes resultaban gratificantes.
Autoestima negativa: Evalúa pensamientos negativos sobre uno mismo, incluyendo sentimientos de fealdad, culpa y autocrítica severa.
Estas subescalas permiten a los profesionales identificar áreas específicas afectadas por la depresión infantil, facilitando un diagnóstico más preciso y un plan de intervención focalizado.
Versatilidad y adaptabilidad
El CDI puede ser contestado directamente por el niño (autoinforme) o, en caso necesario, por adultos de referencia (padres, profesores, cuidadores), adaptando la redacción de los ítems a la tercera persona.
Importancia clínica y educativa
Es uno de los instrumentos más utilizados y validados internacionalmente.
Permite no solo la detección temprana, sino también el monitoreo de la evolución y la respuesta al tratamiento, facilitando intervenciones personalizadas y oportunas.
⚠️ Este instrumento por sí solo no es suficiente para un diagnóstico, se debe complementar con una evaluación clínica especializada.